EL CONSTANTE AVASALLAMIENTO DE LAS IRRESPONSABILIDADES HUMANAS CONDUCEN AL RIESGO PERMANENTE DEL CAMBIO CLIMÁTICO A NIVEL GLOBAL. RIESGOS Y PROPUESTAS.



1-EL CONSTANTE AVASALLAMIENTO DE LAS IRRESPONSABILIDADES HUMANAS CONDUCEN AL RIESGO PERMANENTE   DEL CAMBIO CLIMÁTICO A NIVEL GLOBAL.  RIESGOS Y PROPUESTAS.

                                                Patricia A. Cozzo Villafane y Paula Fabiana Romano

1.1.-INTRODUCCIÓN

El cambio climático hoy día impacta hace que aumenten las temperaturas del planeta y por ese motivo impacta en forma negativa ya sea para la salud pública de las personas, también produce contaminación de las aguas. Esto hace que se torne necesario que se tomen medidas a fin de defender al medio ambiente de algunas actividades que producen contaminación ambiental, ya que esto atenta contra el medio ambiente y por lo tanto vulnera los derechos fundamentales de las generaciones futuras a tener una vida sana y por lo tanto atenta contra el artículo 41 de la Constitución Nacional.


Si analizamos esta situación se puede apreciar que si tomamos medidas para brindar solución a estas cuestiones se podría ahorrar muchos recursos a través de las políticas de prevención de los daños que se causan al medio ambiente. Pero el establecimiento de esas políticas públicas significaría un costo el que en muchas ocasiones debe enfrentarse con alguna de los tantas restricciones presupuestarias que suelen existir.

Esto se debe a que existen diferentes visiones en relación a este tema y por lo tanto posturas en torno al mismo y quienes piensan en los costos de llevar adelante una política ambiental, y por ello se puede afirmar que la decisión de vivir en un ambiente sano debe enfrentar muchos desafíos para que pueda ser llevada adelante.

En el presente trabajo se procura describir estos desafíos de los nuevos tiempos y de los derechos de cuarta generación, junto a la cuarta revolución de carácter digital. En él se esbozaran conclusiones y propuestas para dar solución a estas cuestiones que afectan a las economías y fiscalidad de los países y a los grupos vulnerables.

1.2.-ANTECEDENTES.

 El Cambio Climático es el resultado de una alteración artificial del balance de gases de la atmósfera desde la Revolución Industrial. El mismo es un fenómeno que se manifiesta en un aumento de la temperatura promedio del planeta. El calentamiento global resulta del aumento del efecto invernadero, un proceso en el que la radiación térmica emitida por la Tierra queda atrapada en la atmósfera debido a los gases con ese efecto (GEI). Su presencia es natural y necesaria para mantener la temperatura del planeta en unos valores habitables.

El cambio climático comenzó a producir sus primeros efectos., empezándose a notar en la parte del Ártico y en los océanos tropicales, y con el transcurso del tiempo, en el Norte de América, Europa y Asia.

Los científicos sospecharon por primera vez el cambio climático y la glaciación, Joseph Fourier[1] en 1824, encontró que la atmósfera de la Tierra mantenía al planeta más caliente de lo que sería en el caso de que hubiese un vacío, e hizo los primeros cálculos del efecto del calentamiento. Reconoció que la atmósfera transmitía ondas de luz visible de manera eficiente a la superficie de la tierra. La tierra luego absorbe la luz visible y emite radiación infrarroja como respuesta, pero la atmósfera no transmite la radiación infrarroja de manera eficiente, lo cual por lo tanto incrementa la temperatura de la superficie. Él también cuestionó que las actividades humanas pudieran influenciar en el clima, aunque principalmente se enfocó en los cambios del uso del suelo. En 1827 el documento de Fourier expresó, "La fundación y progreso de las sociedades humanas, la acción de las fuerzas naturales, pueden cambiar notablemente y en regiones vastas el estado de la superficie, la distribución del agua y los grandes movimientos del aire. Tales efectos son capaces de hacer variar, en el curso de muchos siglos, el grado promedio del calor; debido a que las expresiones analíticas contienen coeficientes que se relacionan con el estado de la superficie y el cual influye en gran medida en la temperatura".

A finales de los años 1890, el científico estadounidense Samuel Pierpont Langley había intentado determinar la temperatura de la superficie de la Luna midiendo la radiación de infrarrojo que sale de la luna y llega a la tierra.13 El ángulo de la luna en el cielo cuando un científico tomó una medida determinó cuanto CO2 y vapor de agua la radiación lunar tenía que atravesar para llegar a la superficie de la Tierra, dando como resultado medidas más débiles cuando la Luna estaba baja en el cielo. Este resultado fue poco sorprendente, dado que los científicos conocían el espectro de absorción desde hacía décadas. En 1896, un artículo fundamental del científico sueco Svante Arrhenius[2] predijo por primera vez que los cambios en los niveles de dióxido de carbono atmosférico podrían alterar sustancialmente la temperatura de la superficie a través del efecto invernadero. Existe una variación global del clima de la Tierra la misma se debe a causas naturales, a la acción del hombre y se produce sobre todos los parámetros climáticos: temperatura, precipitaciones, nubosidad, etc, a muy diversas escalas de tiempo. Utilizó la observación de Langley sobre la absorción aumentada de infrarrojo donde los rayos lunares pasan a través de la atmósfera a un ángulo bajo, encontrando más dióxido de carbono (CO2), para estimular un efecto de enfriamiento atmosférico a partir de una disminución futura de CO2. Él se dio cuenta de que la atmósfera más fría retendría menos vapor de agua (otro gas de efecto invernadero) y calculó el efecto de enfriamiento adicional. También se dio cuenta de que el enfriamiento aumentaría la nieve y la cubierta de hielo en altas latitudes, haciendo que el planeta reflejase más luz solar y así promover el enfriamiento. En general, Arrhenius calculó que cortando el CO2 a la mitad sería suficiente para producir una glaciación. El además calculó que una duplicación del CO2 atmosférico daría un total de calentamiento de 5-6 grados Celsius.

La mayor concientización se dio en la década del 1970, por el cual políticos, economistas y científicos empezaron a esbozar que el clima estaba cambiando sustancialmente. La opinión de los científicos estaba cada vez más a favor de los puntos de vista del calentamiento. Para los años 90, como resultado de las mejoras de la fidelidad de los modelos informáticos y del trabajo observacional que confirma la teoría de Milankovitch[3] de las épocas glaciares, se llegó al consenso de que el efecto invernadero estuvo involucrado en la mayoría de los cambios climáticos, y de que las emisiones humanas traían serios problemas de calentamiento global. Desde entonces, la mayoría de los trabajos científicos han sido orientados a la producción de informes del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático.

La Conferencia Mundial sobre el Clima de la Organización Meteorológica Mundial[4], celebrada en Génova en 1979, concluyó que "parece razonable que una cantidad creciente de dióxido de carbono en la atmósfera puede contribuir al calentamiento gradual de la atmósfera baja, especialmente en latitudes más altas….Es posible que algunos efectos de escala regional y global se puedan percibir antes del final de este siglo y llegar a ser significativos antes de la mitad del siglo siguiente"

El calentamiento global supone el ascenso de la temperatura media de la superficie de la Tierra y de la atmósfera de forma continuada. No solo se debe a efectos naturales como el aumento de la actividad solar o a fenómenos que se producen en la Tierra como la emisión de metano en los glaciares o de diversos tipos de gases en la erupción de volcanes. Además de los fenómenos naturales, el calentamiento global se produce por la acción del hombre. Algunas de las causas del calentamiento global que dependen del hombre son las que procedo a mencionar:

La emisión de gases de efecto invernadero. La emisión del dióxido de carbono se produce como consecuencia de la quema de combustibles fósiles como el petróleo o el carbón. El uso masivo de vehículos y la gasolina que utilizan para moverse influyen de manera negativa en este sentido.

El aumento de la deforestación. Los árboles son capaces de transformar el dióxido de carbono en oxígeno y, a medida que desaparecen los árboles debido a los incendios provocados o a la tala indiscriminada, desaparece una de las principales formas de eliminar el dióxido de carbono.

La utilización de fertilizantes en la agricultura. Los fertilizantes que se utilizan en la agricultura liberan en la atmósfera óxido de nitrógeno, que es otro gas de efecto invernadero. El aumento de la población supone un crecimiento de la demanda de alimentos y, por lo tanto, de los cultivos, lo que conlleva la utilización de fertilizantes.

La descomposición de desechos sólidos. La basura que tiramos también tiene un efecto negativo, ya que se descompone liberando gases que contaminan la atmósfera y fomentan el aumento de la temperatura.

 

1.3.-ASPECTOS GENERALES.

Variadas soluciones existen para un efectivo cambio climático, podrían aportar grandes beneficios económicos al tiempo que mejorarán nuestra existencia y protegerán el medio ambiente. También se han contado con marcos y acuerdos globales para guiar el progreso, como "los Objetivos de Desarrollo Sostenible, la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático y el Acuerdo de París".  Las acciones eficientes a tener en cuenta para su acción: la reducción de las emisiones, la adaptación a los impactos climáticos y el financiamiento de los ajustes necesarios. El cambio climático constituye una emergencia mundial que va más allá de las fronteras nacionales. Se trata de un problema que exige soluciones coordinadas en todos los niveles y cooperación internacional para ayudar a los países a avanzar hacia una economía con bajas emisiones de carbono.

Para abordar el cambio climático y sus impactos negativos, los líderes mundiales en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21), en París, realizaron un avance más el 12 de diciembre de 2015 con el histórico acuerdo.

Este histórico acuerdo tuvo como objetivos a largo plazo como guía para todas las Naciones:

Reducir sustancialmente las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el aumento de la temperatura global en este siglo a 2 °C y esforzarse para limitar este aumento a incluso más de tan solo el 1,5 °.

Revisar los compromisos de los países cada cinco años.

Ofrecer financiación a los países en desarrollo para que puedan mitigar el cambio climático, fortalecer la resiliencia y mejorar su capacidad de adaptación a los impactos del cambio climático.

El Acuerdo es un Tratado Internacional legalmente vinculante. Entró en vigor el 4 de noviembre de 2016. En la actualidad, 194 partes (193 países más la Unión Europea) han firmado el Acuerdo de París.

Incluye compromisos de todos los países para reducir sus emisiones y colaborar juntos a fin de adaptarse a los impactos del cambio climático, así como llamamientos a estos países para que aumenten sus compromisos con el tiempo. El Acuerdo proporciona a los países desarrollados una ruta para que ayuden a las naciones en desarrollo a mitigar y adaptarse al cambio climático, creando un marco para un control y una información transparentes sobre los objetivos climáticos de estos países.

El Acuerdo de París proporciona un marco duradero con afán de dirigir el esfuerzo global durante las próximas décadas. Señala el comienzo de un cambio hacia un mundo con emisiones cero neto. La puesta en práctica del Acuerdo también es esencial para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible, ya que ofrece una hoja de ruta para las medidas climáticas que reducirán las emisiones y aumentarán la resiliencia al clima.

Con el Acuerdo de París, los países establecieron un marco de transparencia mejorado. En virtud de este, a partir del 2024, las Naciones Parte informarán de manera transparente sobre las medidas adoptadas y los progresos realizados en la mitigación del cambio climático, las medidas de adaptación y el apoyo prestado o recibido. También se prevén procedimientos internacionales para el examen de los informes presentados. La información reunida por medio del marco de transparencia mejorado se incorporará al balance mundial de la situación, que evaluará el progreso colectivo hacia los objetivos climáticos a largo plazo. Esto dará lugar a recomendaciones para que los países establezcan planes más ambiciosos en la próxima ronda.

Aunque es necesario aumentar en gran medida las medidas relativas al cambio climático para alcanzar los objetivos del Acuerdo de París, los años transcurridos desde su entrada en vigor ya han dado lugar a soluciones con bajas emisiones de carbono y nuevos mercados. Cada vez más Naciones, regiones, ciudades y empresas están estableciendo objetivos de neutralidad de carbono. Las soluciones de cero emisiones se están volviendo competitivas en todos los sectores económicos y ya representan el 25% de las emisiones. Esta tendencia es más notoria en los sectores de la energía y el transporte, y ha creado muchas nuevas oportunidades de negocio para los que se adelantan.

Para 2030, las soluciones de cero emisiones de carbono podrían ser competitivas en sectores que representan más del 70% de las emisiones mundiales.

El cambio de los sistemas energéticos de los combustibles fósiles a las energías renovables, como la solar o la eólica, reducirá las emisiones que provocan el cambio climático. Son acciones y hechos que no se deben postergar. Aunque una coalición cada vez más numerosa de países se compromete a alcanzar las emisiones cero para 2050, alrededor de la mitad de los recortes en las emisiones deben producirse antes de 2030 para mantener el calentamiento por debajo de 1,5 °C. Este logro requiere grandes reducciones en el uso de carbón, petróleo y gas. Para evitar consecuencias climáticas catastróficas, para antes de 2050, debemos reducir en más de dos tercios la extracción de las reservas actuales confirmadas de combustibles fósiles.

Las consecuencias del cambio climático incluyen ahora, entre otras, sequías intensas, escasez de agua, incendios graves, aumento del nivel del mar, inundaciones, deshielo de los polos, tormentas catastróficas y disminución de la biodiversidad. Una catástrofe.

 

1.4.- GASES EFECTO INVERNADERO.

Nos referimos básicamente de la emisión de dióxido de carbono, que en la actualidad es el elemento más nocivo para la estabilidad del planeta. Este componente se produce tras la quema de combustibles fósiles como, por ejemplo, la gasolina que consumen día a día los vehículos o la producción de electricidad. El dióxido de carbono, junto a otros gases derivados de la industria, hace que las partículas de la capa de ozono se desintegren y la Tierra se exponga de forma directa a los rayos solares.

 

Las principales consecuencias de este efecto no solo se reflejan en el progresivo aumento de la temperatura, sino también en el deshielo de los polos, la alteración de los ciclos vitales, la desaparición de especies animales, las sequías y, sobre todo, el desplazamiento y las crisis alimentarias. Se calcula que el año pasado más de 150 millones de personas se vieron obligadas a dejar su lugar de residencia por efectos relacionados con el cambio climático y el deterioro de la capa de ozono.

Los fenómenos interconectados son: Cambio climático, efecto invernadero y calentamiento global. Para comprender de qué se trata el cambio climático nos remitimos a la definición de efecto invernadero, ya que el mismo nos dará una visión amplia para entender mejor cómo interfiere en el calentamiento global. Las diferencias que existen entre el calentamiento global y efecto invernadero nos llevará entender ampliamente en qué consiste el cambio climático.

Enmarcación del problema analizado.

El efecto invernadero es un fenómeno que, en condiciones normales, permite la vida en el planeta. Esto se debe a que impide que el calor del sol que llega a la superficie de la tierra, sea rebotado en su totalidad de nuevo a la atmósfera. Así, un cierto porcentaje queda y eso facilita la vida para todos los seres vivos.

Los inconvenientes surgen con la actividad humana y el crecimiento industrial. La cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) beneficiosos ha aumentado de manera desmesurada. Ello ha ido en crecimiento de manera exponencial., siendo muy perjudicial para la salud de nuestro planeta.

Diferencias entre calentamiento global y efecto invernadero

Más que diferencias entre efecto invernadero y calentamiento global, se debe hablar de una relación intrínseca y directa. El calentamiento global es una de las causas del efecto invernadero y que, a su vez, afectan al cambio climático. El calentamiento global supone un crecimiento considerable de las temperaturas de la Tierra. Esto se produce cuando los gases de efecto invernadero aumentan sus niveles en la atmósfera convirtiéndose en un fenómeno con consecuencias negativas para la vida planetaria. La quema de combustibles fósiles provocados por los vehículos y las emisiones de la industria son las principales fuentes de emisión, que generan este incremento de la temperatura global.

Por otro lado, la principal diferencia entre efecto invernadero y cambio climático se encuentra en que el primero, por sí mismo, es un fenómeno natural y beneficioso para el planeta y los seres vivos. El segundo, por su parte, es perjudicial en todos sus aspectos.

Los gases atmosféricos responsables del efecto invernadero

Para tener más claro qué es el efecto invernadero, es necesario conocer los principales gases que se encuentran en la atmósfera y cuya alteración es la que produce el calentamiento global. Estos gases de efecto invernadero pueden tener un origen natural o ser consecuencia de la intervención humana:

Vapor de agua (H2O)Es un gas invernadero natural. Con el aumento de las temperaturas crece el contenido de vapor de agua en la atmósfera. Como consecuencia, empeoran los efectos de otros gases de efecto invernadero.

Dióxido de Carbono (CO2). El CO2 es un gas que se produce por la quema de combustibles fósiles como el carbón o el petróleo. El dióxido de carbono es la causa de la mayor parte del efecto invernadero causado por la actividad industrial.

Metano (CH4). Sus fuentes principales proceden del material orgánico degradado en la ganadería, en el cultivo de arroz, en los vertederos y en las explotaciones petrolíferas y gasísticas.

Dióxido de nitrógeno (N2O). Se produce y libera en la agricultura y en algunos procesos de la industria química.

Gases fluorados. Han contribuido mucho a la destrucción de la capa de ozono. Afortunadamente, su uso ha disminuido en las últimas décadas.

Ozono (O3). Es un contaminante muy agresivo. No obstante, tiene un origen natural –proviene de las capas altas de la atmósfera– y es muy beneficioso, ya que protege de los rayos ultravioleta solares.

Como consecuencia podemos expresar que los gases de efecto invernadero absorben algunos de los rayos del sol y luego los redistribuyen en forma de radiación. Su creciente concentración en la atmósfera, debido a las actividades humanas, contribuye al calentamiento global. Como su nombre lo indica, estos gases son la principal causa del efecto invernadero.

Consecuencias del efecto invernadero y el calentamiento global

Para entender a fondo los efectos del cambio climático, tenemos que analizar las consecuencias de los efectos que lo provocan. Así, la relación entre efecto invernadero y calentamiento global se encuentra en la proporción de esos gases. Porque el aumento de la temperatura global terrestre desencadena efectos en las corrientes marinas, en los movimientos atmosféricos y en las dinámicas terrestres.

Una mayor temperatura en la Tierra conduce al deshielo de los glaciares. Con ello, se produce un aumento del nivel del mar. También calienta las aguas oceánicas, lo cual altera los ecosistemas marinos. También provoca la acidificación de las aguas. Esto conduce a la migración y a la desaparición de especies.

Por otro lado, provoca una mayor desertificación y sequías. Esto conlleva daños a la agricultura y a la producción alimentaria. Los efectos climáticos extremos son más comunes debido al calentamiento global. Esto se debe a una mayor presencia de gases de efecto invernadero en la atmósfera.

1.5.1   CALENTAMIENTO GLOBAL.


Las actividades humanas, principalmente a través de las emisiones de gases de efecto invernadero, han causado inequívocamente el calentamiento global, con una temperatura superficial global que alcanzó 1,1 °C por encima de 1850-1900 en 2011-2020. Las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero han seguido aumentando, con contribuciones históricas y actuales desiguales derivadas del uso de energía no sostenible, el uso de la tierra y el cambio de uso de la tierra, estilos de vida y patrones de consumo y producción en todas las regiones, entre países y dentro de ellos, y entre individuos. La generación de electricidad y calor mediante la quema de combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural provoca una gran parte de las emisiones mundiales. La mayor parte de la electricidad se sigue produciendo con combustibles fósiles; tan solo una cuarta parte proviene de la energía eólica, la solar y otras fuentes renovables. Las emisiones de gases de efecto invernadero cubren la Tierra y retienen el calor del sol. Esto conduce al calentamiento global y al cambio climático.  El mundo se está calentando más rápidamente que en cualquier otro momento de la historia registrada. Las personas somos responsables del calentamiento global de los últimos dos siglos.  Las actividades humanas, la actividad industrial y química, generan gases de efecto invernadero que elevan la temperatura del planeta al ritmo más rápido de los 2000 años pasados.

La temperatura media de la Tierra es ahora 1,1 °C más elevada que a finales del siglo XIX, antes de la revolución industrial, y más elevada en términos absolutos que en los últimos 100 000 años. La última década (2011-2020) fue la más cálida registrada. En esa línea, cada una de las cuatro décadas últimas ha sido más caliente que cualquier otra década desde 1850. 

La población cree que el cambio climático significa principalmente temperaturas más cálidas., "menuda conclusión". Pero el aumento de la temperatura es sólo el principio de una historia con la consecuente concatenación de hechos infructuosos ante el avance desmesurado de la tecnología industrial, la producción ganadera agrícola. Como la Tierra es un sistema, en el que todo está conectado, los cambios de una zona pueden influir en los cambios de todas las demás. La naturaleza está formada por un delgado equilibrio de consecuencias. El hombre y sus avances científicos y tecnológicos basados en una ambición desmedida económica, crea un desequilibrio radical entre la estabilidad del medio ambiente y las consecuencias de las ambiciones desmedidas.

1.5.2.- CAUSALES INMINENTES DEL DETERIORO MUNDIAL.

La generación de energía

La generación de electricidad y calor a través de los combustibles fósiles provoca una gran cantidad de emisiones globales. La mayoría de la electricidad se genera todavía con la combustión de carbón o gas, lo que produce dióxido de carbono y óxido nitroso, que son potentes gases de efecto invernadero que cubren el planeta y atrapan el calor proveniente del sol. A nivel global, algo más de un cuarto de la electricidad proviene de fuentes de energía renovables eólicas y solares que, al contrario que los combustibles fósiles, emiten poca o ninguna cantidad de gases o contaminantes en el aire.

Productos de fabricación.

La industria y las fábricas producen emisiones, en su mayoría provenientes de la quema de combustibles fósiles destinada a generar energía para la fabricación de cemento, hierro, acero, componentes electrónicos, ropa y otros bienes. La minería y otros procesos industriales también generan gases, de la misma forma que lo hace el sector de la construcción. La maquinaria utilizada en los procesos de fabricación a menudo realizados mediante carbón, petróleo o gas, y con algunos materiales, como los plásticos, están compuestos de sustancias químicas derivadas de los combustibles fósiles. La industria manufacturera es una de las que más contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial.

La tala de los bosques

La tala de bosques a fin de crear granjas o pastos, o por otros motivos, provoca emisiones dado que cuando se talan sus árboles se libera el carbono que estos han estado almacenando. Cada año se destruyen aproximadamente 12 millones de hectáreas de bosques. Puesto que los bosques absorben el dióxido de carbono, su destrucción también limita la capacidad de la naturaleza para mantener estas emisiones fuera de la atmósfera. La deforestación, junto con la agricultura y otros cambios en la utilización de los suelos, es responsable de aproximadamente un cuarto de las emisiones de gases de efecto invernadero.

El uso del transporte

La mayoría de camiones, barcos y aeronaves funcionan con combustibles fósiles. Esto hace que el transporte sea uno de los sectores que más contribuyen a generar gases de efecto invernadero, especialmente en lo que a emisiones de dióxido de carbono se refiere. Los vehículos terrestres son responsables de la mayor parte, debido a la combustión de productos derivados del petróleo, como la gasolina, en los motores de combustión interna. Sin embargo, las emisiones provenientes de barcos y aeronaves siguen aumentando. El transporte es responsable de cerca de un cuarto de las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía a nivel global. Y la tendencia es que continúe este importante aumento del uso de la energía para el transporte durante los próximos años.

La producción de alimentos

La producción de alimentos provoca emisiones de metano, dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero, de diferentes maneras, en lo que se incluye la deforestación y la roturación de tierras para la agricultura y el pastoreo, la alimentación del ganado bovino y ovino, la producción y uso de fertilizantes y el abono utilizado para los cultivos, además del uso de la energía que hace funcionar el equipo de las granjas o los barcos pesqueros, siendo normalmente con combustibles fósiles. Todo esto hace que la producción de alimentos sea uno de los sectores que más contribuyen al cambio climático. Además, las emisiones de efecto invernadero también provienen del envasado y la distribución de los alimentos.

La energía en los edificios

A nivel global, tanto los edificios residenciales como los comerciales consumen más de la mitad de la electricidad total. Como siguen utilizando carbón, hidrocarburos y gas natural para los sistemas de calefacción y climatización, emiten cantidades importantes de gases de efecto invernadero. La creciente demanda de sistemas de calefacción y climatización, junto con el aumento en la adquisición de aparatos de aire acondicionado y en consumo eléctrico por parte de aparatos de iluminación y dispositivos conectados, ha contribuido a un aumento en las emisiones de dióxido de carbono relacionadas con la energía y que tiene su origen en las edificaciones, en los últimos años.

Un consumo excesivo

Su hogar, el uso que hace de la energía, el modo de desplazarse, lo que come, lo que derrocha, todo ello afecta a la emisión de gases de efecto invernadero. Y lo mismo ocurre con el consumo de bienes como la ropa, los componentes electrónicos y los productos fabricados en plástico. Un gran porcentaje de las emisiones de gases de efecto invernadero están ligadas a los hogares particulares. Nuestro estilo de vida tiene un profundo impacto en el planeta. Los más ricos son los que tienen mayor responsabilidad: el 1 por ciento de la población mundial con mayor riqueza, en conjunto genera más emisiones de gases de efecto invernadero que el 50 por ciento más pobre[5].

1.5.3 RESPONSABILIDADES HUMANAS Y AGOTAMIENTO DE RECURSOS.

La escasez de los recursos naturales puede traer grandes consecuencias tanto para el planeta Tierra, como para todos sus seres vivos. Estos son algunos de los efectos del agotamiento de los recursos naturales: La desestabilización del eco sistema trae aparejado como punto primordial la extinción de especies de origen animal y vegetal.

1.6.- CAMBIOS E IMPACTOS OBSERVADOS.

 Se han producido cambios generalizados y rápidos en la atmósfera, el océano, la criósfera y la biósfera. El cambio climático causado por el hombre ya está afectando a muchos fenómenos meteorológicos y climáticos extremos en todas las regiones del mundo. Esto ha provocado impactos adversos generalizados y pérdidas y daños relacionados con la naturaleza y las personas. Las comunidades vulnerables que históricamente han contribuido menos al cambio climático actual se ven afectadas de manera desproporcionada. El cambio climático nos afecta a todos. Al reino animal y vegetal.  El impacto potencial es enorme, con predicciones de falta de agua potable, grandes cambios en las condiciones para la producción de alimentos y un aumento en los índices de mortalidad debido a inundaciones, tormentas, sequías y olas de calor.

1.6.1 PROGRESO ACTUAL EN LA ADAPTACIÓN, BRECHAS Y DESAFÍOS.

La planificación e implementación de la adaptación ha progresado en todos los sectores y regiones, con beneficios documentados y eficacia variable. A pesar del progreso, las brechas de adaptación existen y seguirán creciendo al ritmo actual de implementación. Se han alcanzado límites rígidos y blandos de adaptación en algunos ecosistemas y regiones. La mala adaptación está ocurriendo en algunos sectores y regiones. Los flujos financieros mundiales actuales para la adaptación son insuficientes y limitan la implementación de las opciones de adaptación, especialmente en los países en desarrollo.

1.6.2 CAMBIO CLIMÁTICO FUTURO, RIESGOS Y PROPUESTAS A LARGO PLAZO.

CAMBIO CLIMÁTICO FUTURO.

Las emisiones continuas de gases de efecto invernadero conducirán a un aumento del calentamiento global, con la mejor estimación de alcanzar 1,5 °C en el corto plazo en escenarios considerados y caminos modelados. Cada incremento del calentamiento global intensificará peligros múltiples y simultáneos. Las reducciones profundas, rápidas y sostenidas de las emisiones de gases de efecto invernadero conducirían a una desaceleración perceptible del calentamiento global en unas dos décadas, y también a cambios perceptibles en la composición atmosférica en unos pocos años.

1.6.3 IMPACTOS DEL CAMBIO CLIMÁTICO Y RIESGOS RELACIONADOS CON EL CLIMA.

Para cualquier nivel de calentamiento futuro dado, muchos riesgos relacionados con el clima son mayores que los evaluados en el AR5, y los impactos a largo plazo proyectados son hasta varias veces mayores que los observados actualmente ( confianza alta )[6]. Los riesgos y los impactos adversos proyectados y las pérdidas y los daños relacionados con el cambio climático aumentan con cada incremento del calentamiento global ( nivel de confianza muy alto ). Los riesgos climáticos y no climáticos interactuarán cada vez más, creando riesgos compuestos y en cascada que son más complejos y difíciles de gestionar 

A)   Probabilidad y riesgos de cambios inevitables, irreversibles o abruptos

Algunos cambios futuros son inevitables y/o irreversibles, pero pueden verse limitados por una reducción global profunda, rápida y sostenida de las emisiones de gases de efecto invernadero. La probabilidad de cambios abruptos y/o irreversibles aumenta con niveles más altos de calentamiento global. De manera similar, la probabilidad de resultados de baja probabilidad asociados con impactos adversos potencialmente muy grandes aumenta con niveles más altos de calentamiento global.

B)   Opciones de adaptación y sus límites en un mundo más cálido

Las opciones de adaptación que son factibles y efectivas hoy en día se verán limitadas y menos efectivas con el aumento del calentamiento global. Con el aumento del calentamiento global, las pérdidas y los daños aumentarán y los sistemas humanos y naturales adicionales alcanzarán límites de adaptación. La mala adaptación se puede evitar mediante una planificación e implementación de acciones de adaptación flexibles, multisectoriales, inclusivas y a largo plazo, con beneficios colaterales para muchos sectores y sistemas.

1.7.- VÍAS DE MITIGACIÓN.

Todas las trayectorias modeladas a nivel mundial que limitan el calentamiento a 1,5 °C (>50 %) sin sobrepaso o lo limitan, y aquellas que limitan el calentamiento a 2 °C (>67 %), involucran gases de efecto invernadero rápidos y profundos y, en la mayoría de los casos, inmediatos. reducciones de emisiones en todos los sectores en esta década. Las emisiones globales netas de CO2 cero se alcanzan para estas categorías de vías, a principios de la década de 2050 y alrededor de principios de la década de 2070, respectivamente.

Existe un gran potencial para reducciones futuras de las emisiones mediante una combinación de actividades, tales como la conservación de energía y el aumento de la eficiencia energética; el uso de tecnologías de energía baja en carbono, como la energía renovable, la energía nuclear y la captura y almacenamiento de carbono; y la mejora de los sumideros de carbono a través de, por ejemplo, la reforestación y la prevención de la deforestación. Estas incluyen: reducir la demanda de bienes y servicios que producen altas emisiones, incrementar la eficiencia, incrementar el uso y desarrollo de tecnologías de bajo nivel de dióxido de carbono y reducir las emisiones de combustible.

1.7.1 SOBRE-IMPULSO: SUPERACIÓN DE UN NIVEL DE CALENTAMIENTO Y REGRESO.

 Si el calentamiento supera un nivel específico, como 1,5 °C, podría reducirse gradualmente de nuevo logrando y manteniendo las emisiones globales negativas netas de CO2. Esto requeriría un despliegue adicional de eliminación de dióxido de carbono, en comparación con las vías sin exceso, lo que generaría mayores preocupaciones de viabilidad y sostenibilidad. El sobregiro conlleva impactos adversos, algunos irreversibles y riesgos adicionales para los sistemas humanos y naturales, todos crecientes con la magnitud y duración del sobregiro.

1.7.2 URGENCIAS DE UNA ACCIÓN INTEGRADA A CORTO PLAZO.

 El cambio climático es una amenaza para el bienestar humano y la salud del planeta. Hay una ventana de oportunidad que se cierra rápidamente para asegurar un futuro habitable y sostenible para todo. El desarrollo resiliente al clima integra la adaptación y la mitigación para avanzar en el desarrollo sostenible para todos, y está habilitado por una mayor cooperación internacional que incluye un mejor acceso a recursos financieros adecuados, particularmente para regiones, sectores y grupos vulnerables, y una gobernanza inclusiva y políticas coordinadas . Las opciones y acciones implementadas en esta década tendrán impacto ahora y durante miles de años.

1.7.3 EQUIDAD E INCLUSIÓN.

Priorizar la equidad, la justicia climática, la justicia social, la inclusión y los procesos de transición justa puede permitir acciones de adaptación y mitigación ambiciosas y un desarrollo resiliente al clima. Los resultados de la adaptación se ven mejorados por un mayor apoyo a las regiones y personas con la mayor vulnerabilidad a los peligros climáticos. La integración de la adaptación climática en los programas de protección social mejora la resiliencia. Hay muchas opciones disponibles para reducir el consumo intensivo en emisiones, incluso a través de cambios de comportamiento y estilo de vida, con beneficios colaterales para el bienestar social.

Correr la voz: reducir sus emisiones de carbono.

Mantener la presión política: Presionar a los políticos y empresas locales para que se unan a los esfuerzos para reducir las emisiones de carbono.

Transformar la movilidad: El transporte representa alrededor de una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero y, en todo el mundo, muchos gobiernos están implementando políticas para des carbonizar los viajes.

Controlar tu consumo de energía: Si puedes, cambia a un proveedor de energía renovable o libre de carbono. Instala paneles solares en su techo.

Ajustar la dieta: Consume más comidas a base de vegetales: tu cuerpo y el planeta te lo agradecerán. Hoy en día, alrededor del 60% de la tierra agrícola del mundo se utiliza para el pastoreo de ganado y las personas en muchos países consumen más alimentos de origen animal de los que son saludables.

Comprar lo local y de forma sostenible: Para reducir la huella de carbono de tus alimentos, compra alimentos locales y de temporada. Ayudarás a las pequeñas empresas y granjas del área y reducirás las emisiones de combustibles fósiles asociadas con el transporte y el almacenamiento de la cadena de frío.

 No desperdiciar alimentos: Un tercio de todos los alimentos producidos se pierde o se desperdicia. Según el  Índice de desperdicio de alimentos 2021, realizado por el PNUMA[7], las personas a nivel mundial desperdician 1.000 millones de toneladas de alimentos cada año, lo que representa alrededor del 8-10% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero. 

Vestirse de manera inteligente: La industria de la moda representa entre el 8 y el 10% de las emisiones globales de carbono.

Plantar árboles: Cada año se destruyen aproximadamente 12 millones de hectáreas de bosque y esta deforestación, junto con la agricultura y otros cambios en el uso de la tierra, es responsable de aproximadamente el 25% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero.

Enfocarse en inversiones respetuosas con el planeta: Las personas también pueden estimular el cambio a través de sus ahorros e inversiones eligiendo instituciones financieras que no invierten en industrias contaminantes de carbono.

1.7.4 FINANZAS, TECNOLOGÍA Y COOPERACIÓN INTERNACIONAL.

 Las finanzas, la tecnología y la cooperación internacional son facilitadores críticos para acelerar la acción climática. Si se van a alcanzar los objetivos climáticos, tanto la financiación de la adaptación como la de la mitigación tendrían que multiplicarse. Hay suficiente capital global para cerrar las brechas de inversión global, pero existen barreras para redirigir el capital hacia la acción climática. Mejorar los sistemas de innovación tecnológica es clave para acelerar la adopción generalizada de tecnologías y prácticas. Es posible mejorar la cooperación internacional a través de múltiples canales.

1.8.-DECRETO NACIONAL 822/98., RECURSOS NATURALES, DESARROLLO SUSTENTABLE EN EL MARCO DE "LAS NACIONES UNIDAS".

Que el calentamiento global ha sido documentado científicamente como un problema grave que justifica la adopción de políticas para mitigarlo.

Que las acciones dirigidas a disminuir las emisiones de gases efecto invernadero tienen el mismo impacto sobre la capacidad de la atmósfera para atrapar calor, independientemente del lugar en que se encuentren la fuente y el sumidero de los gases.

Que tanto en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático como en el Protocolo de Kyoto, se reconoce la importancia de implementar mecanismos flexibles para alcanzar de una manera costo-efectiva la reducción de emisiones de los gases de efecto invernadero a nivel mundial, sin alterar el proceso de crecimiento de los países menos desarrollados.

Que con ese objetivo fue creado el llamado "Mecanismo para un Desarrollo Limpio", definido en el artículo 12 del protocolo mencionado, el cual permitirá la realización de actividades de implementación conjunta entre los países desarrollados y los no desarrollados.

Que para llevar a cabo dichas actividades se requiere la identificación y la formulación de proyectos, así como la definición del funcionamiento que tendrá el Mecanismo para un Desarrollo Limpio en el futuro.

CONCLUSIONES.

Actualmente existe un consenso casi generalizado en torno a que nuestro mecanismo de producción y consumo energético. El mismo está generando una alteración climática global mundial que provoca y provocará importantes cambios, y a su vez, serios impactos tanto sobre la tierra como sobre los sistemas socioeconómicos.  Este perjuicio nos conduce a la conclusión de que este fenómeno es de carácter global y presenta, por ende, efectos significativos, crecientes y, en muchos casos, irreversibles en las actividades económicas, la población y los ecosistemas, ámbitos en que en el territorio de América Latina y el Caribe son sectores particularmente vulnerables.

El cambio climático representa, de esta manera, uno de los grandes retos del siglo XXI, ya que los esfuerzos de adaptarse a las nuevas condiciones climáticas e instrumentar los procesos de mitigación de los gases de efecto invernadero son de tal magnitud que será un condicionante para el estilo de desarrollo futuro. 

La evaluación de los efectos e impactos del cambio climático y el análisis de las mejores formas de adaptarse e instrumentar un proceso adecuado de mitigación de gases efecto invernadero resultan imperativos para el diseño de políticas públicas que permitan transitar a los países hacia un desarrollo sostenible y sustentable.

En función de lo anterior, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ha venido incursionando, junto a varios países de la región, en la evaluación económica del cambio climático generando información, a escala local, y mundial sobre los impactos sectoriales y en grupos socioeconómicos específicos. La generación de información permite el diseño de políticas públicas orientadas a atenuar los efectos adversos del cambio climático y a definir acciones de mitigación, orientado a trazar una senda de desarrollo y crecimiento verde con economías bajas en carbono basadas en la equidad e inclusión social, no sólo presente sino también para las futuras generaciones.

 

SUGERENCIAS.

Es un imperativo tener conocimiento de las medidas que hay que tomar para conducir a un freno terminante del calentamiento global e implicarnos de manera consciente en la reducción del cambio climático.

Si queremos poner freno al cambio climático, es necesario que todas las personas tomemos consciencia.  El cambio se inicia desde el comienzo del día., en el lugar de trabajo, en la casa, en las calles o junto a las ONG que luchan diariamente para cambiar el modo de vida.

En una sociedad donde la presión de quienes toman las decisiones políticas es esencial para pedir cuentas a la hora que vayan a la raíz de las acciones que fomentan la crisis climática y las desigualdades sociales. Sin embargo, no podemos dejar todo en manos de los gobiernos. La sociedad civil debe participar activamente en un papel importante y movilizarse: La sociedad civil puede exigir y defender el derecho a un planeta sostenible a gobiernos y también a empresas, puntualizando sus compromisos climáticos, asegurándose de que los cumplan e instándoles a ir más allá en sus acciones, ya que como el mismo es un derecho debe existir empoderamiento ciudadano.

La vía judicial es un recurso expedito. Es el caso de las sentencias en Francia y Países Bajos que obligan a sus gobiernos a tomar medidas para frenar el cambio climático. El respaldo de la sociedad civil movilizada es imprescindible para que quienes luchan contra el cambio climático sean escuchados en el escenario político.

Luchar contra el cambio climático es responsabilidad de todos mancomunadamente.

A nivel individual también la propuesta es la movilización, aunque la suma de voces y su estructuración en movimientos sociales siempre serán más fuerte. Sea formando parte de acciones de grupos locales, conferencias, asociaciones vecinales…, participando en manifestaciones y protestas, escuchando y promoviendo a personas que impulsan iniciativas, o simplemente expresando el deseo de construir un mundo más justo, sostenible y solidario.

Cada individuo puede contribuir a un cambio rotundo con conciencia social, para las generaciones futuras.

Es menester actuar en cada uno de nosotros en nuestras vidas con la cotidianeidad para limitar la huella de carbono como una práctica deportiva, contribuyendo a la transición ecológica. En la alimentación, dando el simple ejemplo que podemos comprar productos locales y ecológicos, disminuir nuestro consumo de carne, estar atentos para que se respeten las condiciones de trabajo de las y los pequeños productores. Podemos preguntar a industrias y supermercados por sus políticas medioambientales y demostrar que influyen en la compra o no de un determinado producto. Cada vez que optamos por el transporte público (sobre todo el tren) contribuimos a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, al igual que cuando optamos por caminar, desplazarnos en bicicleta o sustituir el avión por trayectos por tierra cuando sea posible.

Compartir el propio vehículo para concurrir al trabajo o transportar a otras personas a los mismos sitios ello limitará el número de desplazamientos y, por tanto, las emisiones.

Aislar mejor nuestra vivienda para consumir menos calefacción o aire acondicionado, consumir energías renovables, tener en cuenta el certificado energético de los electrodomésticos…

Como es de apreciar, los medios de luchar contra el cambio climático a escala individual se multiplican en todos los órdenes.

 

1.1  REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.

ACUERDO DE PARÍS. TRATADO INTERNACIONAL: El Acuerdo de París es un tratado internacional sobre el cambio climático jurídicamente vinculante. Fue adoptado por 196 Partes en la COP21 en París, el 12 de diciembre de 2015 y entró en vigor el 4 de noviembre de 2016.

CONVENCIÓN MARCO DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE CAMBIO CLIMÁTICO. La Convención establece un marco general para los esfuerzos intergubernamentales para hacer frente los desafíos provocados por el cambio climático.

TRATADO DE KYOTO: En concreto, el Protocolo de Kyoto pone en funcionamiento la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático comprometiendo a los países industrializados a limitar y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) de conformidad con las metas individuales acordadas.

 

COAUTORAS.

Dra. Patricia A. Cozzo Villafane. Abogada. Especialista en Tributación Local por la Universidad de

Tres de febrero. Posgrado en Tributación Sub-nacional por la Universidad de Tres de febrero. Diplomada en Gestión de Políticas Públicas. Posgrado en Discapacidad y derechos de la Universidad de Buenos Aires. Abogada litigante en materia penal. Docente Ley Micaela IPAP Provincia de Buenos Aires. Doctoranda en Ciencias Jurídicas con tesis en Derecho Penal Tributario y Económico. Funcionaria de la Agencia de Recaudación Arba. Conferencista Internacional. Autora de Artículos de la especialidad. Coautora y Colaboradora para la redacción de libros y tratados colectivos. Autora del libro Asociación ilícita tributaria, moratorias, blanqueos, política criminal y derechos humanos.

 

Dra. Paula Fabiana Romano. Abogada egresada de la Universidad de Morón. Especialista en Familia por la Universidad de Buenos Aires. Doctora en Ciencias Jurídicas y políticas. Doctora en Ciencias Jurídicas y políticas. Tesis doctoral incertidumbre jurídica en torno al estatuto y derechos del embrión humano crio conservado, efectos y propuestas en términos de derechos humanos. Diplomada en discapacidad por la universidad de Buenos Aires. Diplomada en Familia y Sucesiones por la Universidad de Buenos Aires. Escribana Pública. Autora de publicaciones digitales para Argentina, Latinoamérica y Europa.

 

 

 

 

 

 



[1] Jean-Baptiste Joseph Fourier (Francia. 21 de marzo de 1768-París16 de mayo de 1830) fue un matemático y físico francés conocido por sus trabajos sobre la descomposición de funciones periódicas en series trigonométricas convergentes llamadas Series de Fourier, método con el cual consiguió resolver la ecuación del calor. La transformada de Fourier recibe su nombre en su honor. Fue el primero en dar una explicación científica al efecto invernadero en un tratado

[2] Svante August Arrhenius fue un científico y profesor sueco galardonado con el Premio Nobel de Química de 1903 por su contribución al desarrollo de la química con sus experimentos en el campo de la disociación electrolítica

[3] Las variaciones orbitales o ciclos de Milanković describen los efectos conjuntos que los cambios en los movimientos de la Tierra provocan en el clima a lo largo de miles de años.

[4] La Organización Meteorológica Mundial (OMM) es una organización internacional creada en 1950 en el seno de la ONU cuyo objetivo es asegurar y facilitar la cooperación entre los servicios meteorológicos nacionales, promover y unificar los instrumentos de medida y los métodos de observación.

[5] Extraído de distintas fuentes de la ONU

[6] El IPCC en sus informes asigna niveles de confianza y grados de probabilidad a sus afirmaciones. Hablamos de ellos y del Sexto Informe del IPCC (AR6) ante las inminentes negociaciones en la COP26 de Glasgow, en el Día Internacional contra el Cambio Climático

[7] Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente · Programa de las Naciones Unidas para los Asentamientos Humanos


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